Efectivamente,
según pienso yo, a lo largo de los próximos días más nos vale andar relajados y
con la cabeza fría; porque mucho me temo que Moody’s, Standard & Poor's y
hasta Oscar & Mayer (e incluso el vaticano, si se tercia), van a emplear toda su
artillería para meternos el miedo en el cuerpo.
Y
no es para menos.
Su
fuerza deriva del pánico de nuestros gobernantes a la rebaja de calificación de
sus respectivas deudas.
Pero ese “arma de destrucción masiva” es muy delicada y
basta con que algún país decida “mear fuera del tiesto” y se llame “a andanas”,
para dejar con “el pañal levantado” al "mago" de los “todopoderosos mercados” y
estropearle “el truco”.
Y,
con un poco de suerte, estamos en camino de ello.
Siempre
se ha dicho que “la avaricia rompe el saco” y me da la impresión de que los
griegos, que están hasta el colodrillo de insultos, amenazas y recortes que
sólo sirven para ponerles cada vez en peor posición y exigirles cada vez más,
se están acercando al límite en el que les dará igual lo que les llamen, o con
qué que les amenacen y dirán que no hay más recortes, que no piensan vender “la
acrópolis”, ni privatizar lo poco que le ha quedado al Estado después del
último saqueo.
Y,
si lo hacen (y ya el pasado fin de semana ha debido de haber algo más que
palabras), convencido estoy de que “no pasará nada”.
Y
si eso ocurre, mucho me temo (me alegro) que la sensata y mezquina Sra. Mérkel,
el histrión y “san-para-mí” Sr. Sarkozy
y el insolidario y “gorrón” Sr. Osborne, replegarán velas tan pronto como
calculen que alguien pueda romper la baraja y dejar a “sus bancos” con cara de
panoli recontando “papelitos” con su valor reducido a la mitad.
Tampoco
es tan difícil ¡cóño!.
Se trata de prestarles
directamente a los griegos (al 1,25%) el mismo dinero que les dan a los bancos
para que se lo presten a esos mismos griegos a intereses de auténtica usura.
Lo
que pasa es que esto, si ocurre, que ojalá ocurra, puede terminar siendo contagioso
(Portugal, Irlanda, España) y acabar de un plumazo con la pretensión de “privatizar”
toda Europa.
Pongo
a disposición del respetable algunas opiniones, no precisamente
de marxistas-leninistas, que abundan sobre el tema.
Así
que:
¡Atentos!
que los buitres ya sobrevuelan el cielo patrio. Los
"expertos" reclaman nuevos ajustes en España
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