28/4/15

A petición expresa de D. Vicenç Navarro



Ando en los últimos tiempos un tanto engolfado en cuestiones que, en puridad,  podríamos calificar de banales; Pero que, a título personal, me resultan inaplazables e importantes, por tener que ver con “las cosas del comer”.
Por este motivo (Y afortunadamente para quien esto lea) no voy a extenderme en el panegírico del texto cuyo enlace adjunto.
Me limito a atender la petición del profesor D. Vicenç Navarro de ayudar a difundir su artículo debido al veto no confesado al que los grandes medios de comunicación le tienen sometido.
Lo hago con gusto y convencimiento dado que tengo la impresión de que una buena parte de todos nosotros no nos estamos enterando de qué es lo que se ventila en estos momentos en Grecia.
Y nos están haciendo creer que está “anocheciendo”, cuando la realidad es que está empezando a “amanecer”
Y a la “madrastra Europa” (FMI, BCE, Eurogrupo y toda su santa compaña neoliberal, depredadora y avariciosa) le pasa como a los vampiros: Que tiene pánico a la luz del sol porque pone al descubierto su debilidad.
Perdón; Al final me extendí demasiado.
Saludos.

11/4/15

Desconectando las máquinas de niebla XXXIV (Las estadísticas falseadas)



Probablemente todos hemos escuchado alguna vez esa gracieta que define la estadística como una ciencia que explica que "si yo me he comido dos huevos y tú ninguno, se puede afirmar sin ningún margen de error que ambos nos hemos comido un huevo”.







En contra de lo habitual, en esta ocasión la reflexión que traigo a cuento no es mía sino de un señor llamado José Luis Gallego a quien “descubrí” recientemente (lástima no haberlo hecho antes) a raíz de un hermoso, poético y lúcido artículo dedicado a las recientes inundaciones provocadas por el río Ebro. “El Ebro sigue siendo el Hiber”
En esta ocasión su reflexión me parece oportuna porque desde hace ya bastante tiempo vengo pensando en la cantidad de “morralla” y “desinformación” que nos inoculan diariamente con el cuento de que “lo dicen las estadísticas”
En unos casos se trata de desinformación pura y dura elaborada con la intención de engañarnos (Por ejemplo los famosos y bien publicitados “Informes Pisa” sobre cuestiones educativas) y propiciar un estado de opinión conveniente a los intereses de quienes las promueven (Y financian).    
En otros, como supongo que es el caso que nos ocupa, se trata más bien de una mezcla entre la incompetencia (de quienes realizan el trabajo de campo y elaboran los primeros resultados) y la falta de rigor de quienes tendrían la obligación de homogeneizarlos pero, por impericia (o interés de otros) no se toman la molestia de hacerlo, ni tampoco de facilitar los datos necesarios para valorar debidamente los “resultados”.
Que aproveche, a quien quiera leerlo; Y, a seguir reciclando.
Que, con independencia de lo qué coño hagan ello, al menos supone un “gesto” de respeto por nuestro propio mundo y un sano ejercicio de autodisciplina (cuando no un motivo de reflexión vital).
Saludos.